La evaluación, cualquiera que sea, tiene que enfrentar la complicación de definir sus criterios y explicitarlos y explicarlos a las personas que serán evaluadas.  Los alumnos sabrán qué se tomará en cuenta para su producto final de cada trabajo. (rúbrica)

No existe una sola evaluación, estamos ante procesos de desarrollo lo que hace que cada ser humano aprende de manera diferente y entorno a eso, no valoramos sólo contenido, se valoran otros aspectos que observamos en el diario trabajo con sus hijos. La autoevaluación es fundamental para que de manera crítica conozca y valore su propio aprendizaje. La coevaluación es primordial, ya que nos enfrentamos a la opinión de los demás ante el desarrollo del trabajo en equipo, y aprenda a no tomar las cosas de “manera personal”, pero sí de manera creativa y con conciencia del cambio y mejora.

La evaluación no es exclusiva sobre contenidos, por ello se les aplican exámenes en tres momentos del ciclo escolar, viene un equipo de trabajo especializado en ello, realizan una evaluación diagnóstica al inicio, otro durante el ciclo y uno más al finalizar el ciclo, de tal manera que las maestras generemos estrategias de trabajo para la mejora en esas áreas de oportunidad por grupo e individualmente. Ellos nos apoyan para generar esas actividades de mejora.